martes, 13 de abril de 2010

Altamar


Navegando bajo cielo abierto y saboreando la sal marina. Así me imaginaba estar. Los cabellos al viento, libre como todos esos pájaros que revoloteaban el viejo casco que en idas y vueltas supo volver a flotar. El mapa esta lleno de trazos. ¿Sos mi Norte o yo tu Sur? Las velas en alto, cada tanto las debemos arriar. Tu sabes, el viento no siempre es favorable. Ahi estaba el timón, llevando este barco a la deriva, con la brújula más desorientada que pudimos encontrar. ¿Dónde nos llevará? Todavia no interesa, aunque yo no he visto ningun bote de reserva o chaleco salvavidas.
A lo lejos, veo nubes negras. Me lo temia... se aproxima una tormenta.